Hay muchas personas que son partidarias acérrimas del racionalismo elemental. Odian la astrología, pero también la astronomía, se niegan a admitir, por ejemplo, que la luz se curva o que la gravedad puede ralentizar el tiempo. Les exaspera el comportamiento de las partículas subatómicas. Desean, simplemente, que el universo se comporte con sensatez. Su sensatez. Una sensatez que no ve mucho más allá de sus narices. Una sensatez según la cual la tierra no es redonda y el sol se mueve y no la tierra (¿o es que nadie se ha asomado a la ventana de buena mañana, al mediodía y al atardecer sin comprobar cómo el sol se mueve?). La crisis, además de otros males, nos está imponiendo esa sensatez, la sensatez de los imbéciles. Algunos ejemplos: Las reformas, es decir, los […]
Archivos diarios: 13 septiembre, 2011
1 entrada