Yendo ayer hacia el Carrefour que hay en la Ciudad de la Imagen con intención de comprar pescado, me topé en una glorieta cercana con un cartel electoral de Mariano Rajoy. Bajo el rostro allí retratado había un eslogan, lema, consigna -o como quiera llamarse- que decía así:
Las ideas claras
Con Rajoy es posible
Mi sempiterno odio a los publicitarios dedicados a la promoción política subió, de repente, varios grados. ¿Por qué?
Porque el eslogan no hay por dónde cogerlo, ni política ni gramaticalmente. ¿Qué es lo posible? ¿Las ideas claras? Pues entonces la segunda parte del eslogan debiera conjugarse en plural (“son posibles”) y si no es eso, ¿a qué coño se refiere la posibilidad?
Yo creo que hay una conspiración contra Rajoy. Empezando con sus publicitarios, continuando con sus apoyos mediáticos (está archidemostrado que es imposible ganar unas elecciones si te apoyan Pedro José Ramírez y Federico J. Losantos), siguiendo con los administradores de las víctimas (¿nadie se ha dado cuenta de que el tal Alcaraz es gafe?)… y finalizando con el as de todas las barajas: los obispos (¡qué cuadrilla de necios!). Desde aquí –si se me permite- me atrevo a recomendarle a ZP que no haga campaña. Con esos adversarios no puede perder. Y Rajoy con esos amigos no precisa de enemigos para hundirse.
¡¡Amigos para la eternidad!!
